31/3/14

tarín tarín tarín

Bueno vamos, no seas hija de puta no te vas a poner a llorar! Me decía hoy a la mañana mientras me vestía para ir al canal y parecía que esas mismas palabras me disparaban las lágrimas hasta los ojos.

Si bien por estos días no soy del todo yo, la emoción que me embargaba saber que Am empezaba la salita de 3 escapaba a mi torbellino hormonal del 6º mes de embarazo.

Llegué al mediodía y si hubiese sido por ella salíamos en ese mismo momento para el jardín que nos queda a dos cuadras. Le saqué sus fotitos al lado de unas plantas en la entrada de casa, mirá si la abuela Carmen se quedaba sin registro fotográfico de ese momento y nos desterraban para siempre del edén.

Mi hermano me escribió temprano, en el chat que tenemos entre hermanos,  para saber como estaba la chiquita por su primer día y que él estaba emocionado también. Mientras que la #sinco (la sincorazón) de mi hermana le preguntaba porque estaba emocionado él? Le dije que un poco por la sobrina y otro poco porque ahora tiene que pagar los gastos en dolares de la tarjeta luego de sus vacaciones en el caribe mexicano.

Me gusta saber que es un momento importante para toda la familia, J pidió salir antes para estar hoy también con nosotras.
Entró a la salita, se sentó muy seria mirando todo atentamente, y cantó tímidamente una canción que se sabía cuando el profe de música agarró la guitarra.

Me podría poner un poco ácida sobre los especímenes con los que habrá que lidiar en la puerta del jardín, esa fauna que son los "papis", pero no hoy no, hoy estoy tiernita como un butter toffe.




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